La obra de Julieta Aranda se centra en el potencial estético de la circulación del capital cultural a través de piezas que no están atadas a un solo medio. En Untitled (Coloring Book II) [Sin título (Libro para colorear II)], Aranda juega con las paredes blancas de la galería utilizándolas como fondo y superficie “neutral” sobre la cual invita a los espectadores a imaginar nuevos colores. La obra consiste en una colección de títulos de pintura comerciales aplicados a la pared de exposición bajo un rectángulo blanco correspondiente, una colección de índices que ejercitan la mente a través de la ausencia del color. Al apropiarse de los nombres de una tabla de colores y pedirle al espectador que los vuelva a imaginar, Aranda genera una transacción alternativa de capital cultural.